martes, 24 de enero de 2012

A mil besos de profundidad


Como si de un regalo divino se tratase cayó en mis manos el libro “a mil besos de profundidad”. Se trata de una antología que recoge los mejores poemas y canciones de Leonard Cohen entre 1956 y 2006.

Acabo de terminarlo. No recuerdo haberme sumergido de una manera tan intensa en la lectura de este género literario desde que, siendo el año noventa y cuatro, descubrí  “La voz a ti debida” de Pedro Salinas. Y es que, si bien siempre mis preferencias se inclinaron más hacia el realismo de cualquier novela, de vez en cuando, por sorpresa, me fascinó alguna obra de la literatura en forma de verso.

La lectura de Cohen, ha despertado en mí sensaciones de un contraste brutal, casi salvaje. Mientras el autor puede estar describiendo un momento extraordinariamente erótico, repentinamente acaba introduciendo un elemento tan ordinario y, diría repugnante, como puede ser una mosca.

Pero la antítesis va más allá, rompe momentos idílicamente utópicos, te traslada y seduce a través de un único verso y termina estampándote contra la crueldad de la vida mundanal.

Así mismo me llama la atención la violencia que ejerce el autor hacia una de las partes de nuestra anatomía mejor tratadas en historia de la literatura: los labios. Un maltrato a través del cual Leonard  hace que "el silencio florezca en ellos en forma de tumores"

Por aquello de seguir la esencia discordante de Leonard no reproduciré en este post ninguno de los  versos más hermosos, compartiré unas sencillas líneas de “Al oír un nombre mucho tiempo sin decir” que,  si bien pasan algo desapercibidas, son de lo más elocuente.

La historia es una aguja
Para hacer dormir a los hombres
Untada con el veneno
De todo lo que quieren conservar

Recomiendo en estos tiempos de dificultades buscar un pequeño espacio para el deleite de los sentidos de la mano  del genio de la ironía, el sarcasmo y la flagelación

APL


 

miércoles, 18 de enero de 2012

La “paternidad” en lista de espera


Enero de 2012, a la espera de un año de cumplirse el plazo previsto en la “Ley de Igualdad" para alcanzar el objetivo de aumentar hasta cuatro semanas de duración el permiso de paternidad. Y aquí estamos…

A bombo y platillos hemos anunciado desde UGT Andalucía a partir de la entrada en vigor de la Ley de Igualdad esta pretendida medida, que se va aplazando años tras año, y que en 2013 dejará definitivamente de ser una incógnita su esperada aplicación.

Aquellas novedades tan significativas de la citada Ley, como son el impulso de una igualdad efectiva a través de un cambio de parámetros en los usos del tiempo entre mujeres y hombres, y la apuesta por un empresariado socialmente responsable, se quedan, cinco años después, en meras declaraciones de intenciones. Esto vuelve a significar que no hay voluntad real de ir más allá de una igualdad formal de mujeres y hombres.

La conciliación de la vida laboral, familiar y personal que el espíritu de la Ley de Igualdad la vinculaba a la corresponsabilidad familiar entre ambos sexos sigue siendo misión de auténtica audacia para las mujeres, en especial las que son madres o tienen personas dependientes a cargo. Aún siendo verdad que en los últimos años ha habido un acercamiento de hombres que trabajan fuera de casa en el ámbito doméstico, aún dista mucho de parecerse al porcentaje de mujeres que compatibilizan ambas esferas, laboral o pública y doméstica o privada.

Y es que el estado de crisis muestra la escasa credibilidad que otorgan los que detentan el poder, tanto porque son hombres la mayoría, o porque son mujeres que adoptan patrones masculinos para mandar, a cuestiones de índole menor como el principio de igualdad de oportunidades para ambos sexos. El paternalismo que legisló la igualdad enseña ahora su peor cara, se viste con pantalones de talle masculino y vuelve gris todo aquello que vistió de lila. El receso asoma ya en los centros de trabajo, el entusiasmo con el que muchas trabajadoras defendían los derechos de conciliación que otorga la Ley, y las medidas de mejora en los Planes de Igualdad ampliamente trabajadas desde los sindicatos, han dado paso al miedo a solicitar lo lícito por reservar el puesto de trabajo. A desandar lo desandado nos invitan, volviendo a la apuesta de mínimos, al no pedir por no recibir una carta de despido; y a lo peor sin pedir nada, basta con saber la edad que tienes si eres mujer.

Maternidad, lactancia, reducciones de jornadas, siguen siendo motivos para el despido o para pasarlo mal en la empresa en forma de acoso por razón de sexo, pero lo que, como UGT Andalucía, no vamos a permitir desde la acción sindical es que el panorama económico reconvierta la maternidad en un rol a desempeñar sin salir del ámbito doméstico. Las empresas deben entender que necesitan remodelarse, reinventarse y adaptar sus recursos no sólo a las necesidades del mercado sino de las personas que conforman cada entidad empresarial.

La Ley si acertó con la corresponsabilidad entre mujeres y hombres como clave de una verdadera igualdad; la ampliación del permiso de paternidad es sólo una de las llaves que abre la puerta.

lunes, 2 de enero de 2012

La pesadilla de Ana Mato ¿seguirán resistiéndose las malas lenguas a llamarlo por su nombre?

 

Acaba de producirse el primer crimen machista de este año 2012 y el tercero bajo el mandato del PP.



Sería tan populista como la política que ustedes hacen, responsabilizar  al nuevo gobierno de hechos como éste. No sólo eso, sería inmoral, injusto y hasta desleal con la sociedad. Una sociedad que lo que merece es que se acabe con este problema de Estado. ¿verdad que lo sería?

Entonces ¿por qué ustedes responsabilizan al anterior gobierno de no poner las medidas oportunas? ¿Incluso llegan a acusarlo de haber aprobado una ley que no sólo no evita las muertes sino que además sostienen hipócritamente que éstas se han incrementado? Como si la Ley invitase o potenciase la violencia de género.

Los datos dicen otra cosa,



Déjense de partidismo y gobiernen, asuman su responsabilidad y atiendan a las ciudadanas y ciudadanos de este país. Dejen de mirar atrás porque los que gobernaban ya pagaron sus errores. De la cara señor Rajoy, no se esconda que es usted el Presidente del Gobierno aunque todavía no se lo crea.

Y sobre todo, señora Mato, asuma que no es fácil. Que para alcanzar la igualdad hay mucho que trabajar, deje de dar argumentos al machismo rancio de este país, a ese patriarcado que sigue defendiendo argumentos como la violencia psicológica. Ese mismo que, pasando de puntillas por la realidad, obvia que las que morimos somos nosotras.



Sea valiente y llame a las cosas por su nombre,
haga un favor a este país y reconozca la Violencia de Género.


APL




En el horizonte, el último día del año


No siempre tiene una la suerte ni la oportunidad a su alcance de tocar literalmente el cielo con las manos.

Tener un gran amigo aficionado al parapente tiene este valor añadido. Por eso, no pude resistirme a despedir el año “por todo lo alto” como comentaba uno de mis compañeros en facebook.

A pesar de que ya había experimentado la sensación de volar en paramotor y en ultraligero, hacía tiempo que no repetía. Y subir al cielo el 31 de diciembre de 2011, ha tenido unas connotaciones bien distintas.
Desde arriba, la amplitud de miras, la perspectiva, la serenidad y la armonía del paisaje me hacen pensar que ojalá pudiésemos ver con esta visión tan completa y tan clara el futuro que asoma para los próximos años.

2011 ha sido un año duro, muy duro para  los ciudadanos y ciudadanas de este país, para el pueblo, para las clases baja y media. Han sido días de precariedad laboral, de conflictividad en las empresas, de retroceso en derechos sociales y por ende, de castigo a los de siempre, las personas que menos tienen. Debilitar a la clase trabajadora, que empieza a ser la “clase parada” con el torticero argumento de “lo malos” que somos los sindicatos, parece el objetivo principal.

La devastadora crisis que más que cabalgar, galopa, parece estar  dispuesta a llevarse por delante hasta el derecho a respirar sin pagar por ello.

En España, como en otros países, ya se ha llevado un gobierno por delante. Al gobierno saliente liderado por el Partido Socialista Obrero Español, no le hemos permitido hacer políticas ultraconservadoras. La ciudadanía ha “bien entendido” que un partido de izquierdas no podía “gobernar” ubicándose al otro lado, a la derecha, y no sólo eso…hemos entendido que ni siquiera gobernaba, gobiernan otros. Así que ante tal incongruencia, se ha optado por “mano dura” y mayoría absolutísima para el partido en la oposición hasta ese momento, el PP.

El partido entrante, el “popular” tampoco gobernará, sin embargo, se encontrará mucho más cómodo entre este amasijo de despropósitos, que sí comulgan con su ideología conservadora, aprovechará y sacará tajada de todo esto, sin que tenga el mismo coste para ellos, pues el pueblo sí identificará las medidas con el color del gobierno. 

Una de las consecuencias colaterales que no debe pasar por alto (y apuesto, también estaba más que prevista) ha sido el movimiento, desbarajuste y las  crisis internas en instituciones, partidos y organizaciones progresistas. La brutalidad, la agresividad, la contundencia y lo imprevisible de una de las mayores crisis mundiales, han dejado literalmente noqueadas justo a estas entidades, que no dan crédito a lo que ven, ni parecen saber cómo reaccionar contra el enemigo, dedicándose más bien a tirarse los trastos a la cabeza y a buscar un culpable dentro.

No me cabe la menor duda de que no hay mal que por bien no venga, que las crisis son oportunidades y que la gente de izquierdas y sus organizaciones vamos a reaccionar como siempre lo hemos hecho, y más vale que esto vaya siendo más pronto que tarde.

Adaptarse a la nueva realidad, buscar formas de trabajo distintas pero igual de eficaces que las de otros tiempos y apostar por nuevos liderazgos es algo ya inevitable.

En el horizonte suenan tambores de guerra, y los tamborileros se esconden
en el anonimato para, jugando al despiste, no pagar las consecuencias
de sus hechos y su política de hostigamiento a la ciudadanía.

Amigas y amigos quiero desearos una feliz entrada de año. Deseo que 2012 nos traiga salud para permanecer al pie del cañón y mantener el equilibrio, fuerzas para librar las batallas por venir e ímpetu para promover y ejecutar cambios importantes. Solo así entiendo podremos alcanzar los principales objetivos para el futuro: justicia y derechos sociales y redistribución de la riqueza.

Un abrazo enorme y mucha izquierda!

APL